Refuerzo positivo en mamíferos marinos

Como ya he explicado en anteriores entradas, el entrenamiento de mamíferos marinos en zoológicos y acuarios consiste en entrenar a través del refuerzo el cual no tiene por qué ser necesariamente pescado... ¿qué tipos de refuerzos podemos usar al entrenar mamíferos marinos? (y esto a su vez se puede emplear para entrenar a otros animales)

Comencemos por entender que existen dos tipos de reforzadores: primarios y secundarios y por lo tanto debemos saber dónde colocar cada tipo de refuerzo; esto es muy sencillo ya que el refuerzo primario es algo necesario para la supervivencia del animal (dicho en otras palabras, el alimento), mientras que el secundario es todo lo demás, cualquier cosa positiva que le puedas dar al animal que no necesite al 100% para vivir. Pero no te confundas, el echo de que uno sea "primario" y otro "secundario" no significa que el primario tenga un mayor valor que el secundario para el animal, de echo, lo mejor es conseguir que el animal se motive solo con refuerzo secundario de tal forma que no sea necesario que realice correctamente un ejercicio para que coma.

Ahora veamos dentro de estás dos clasificaciones, qué refuerzos podemos usar:

- Refuerzo primario: Alimento, en este caso incluiríamos arenque, sprat, capelín, calamar, etc. El pescado varía según el parque. Aunque la gelatina y el hielo también se ofrezcan como alimento en algunos parques, estos no entrarían dentro del refuerzo primario ya que no son alimentos necesarios para su salud.

- Refuerzo secundario: Aquí viene lo bueno... juguetes (ofrecer muchos juguetes al finalizar la sesión si esta ha ido correctamente), caricias (una caricia cariñosa en el melón para los cetáceos o en el cuello para los leones marinos puede servir perfectamente como refuerzo), hielo o gelatina (ahora sí, ofrecer al animal un puñado de hielo o gelatina es una forma de reforzarlo), uniones sociales (si tenemos a dos delfines separados del resto del grupo para una sesión veterinaria, por ejemplo, al finalizar la sesión, el simple echo de permitirles volver con su grupo resulta muy reforzador), otros ejercicios (hay delfines a los que les encanta saltar, a otros les gusta más nadar a toda velocidad y otros prefieren emitir sonidos... cada animal tiene un ejercicio con el que disfruta mucho así que pedírselo es una forma de reforzar si lo hacemos justo después de haberle pedido un ejercicio que sabemos le cuesta más)

A pesar de las críticas por parte de animalistas que afirman que este tipo de ejercicios humillan a los animales y se asocian a circos, la realidad es que los aros y pelotas son un juguete ideal para tener a los animales entretenidos y se pueden usar como refuerzo secundario

Con ambos refuerzos hay que tener muy en cuenta los gustos de cada animal, unos prefieren arenque, otros disfrutan más del calamar... a unos les encanta que los acaricien y otros prefieren jugar solos con el enriquecimiento. Cada animal es un mundo y por lo tanto no todos los refuerzos tienen el mismo efecto; sí, todos refuerzan, pero unos más que otros según el animal con el que estemos y por ello es muy importante conocer muy bien al perro, al gato, al delfín o al león marino que tenemos delante antes de empezar a entrenarlo.